Proyecto SPICE Inyección de Partículas Estratosféricas para la Modificación Climática
Climático 10:32
Unos 50 grupos ambientalistas de todo el mundo llamaron a firmar una carta abierta para exigir al gobierno del Reino Unido y a los consejos de investigación (UK Research Councils) que deje sin efecto un proyecto que prevé inyectar aerosoles a la estratosfera para enfriar artificialmente el planeta.
El proyecto SPICE (siglas en inglés de Inyección de Partículas Estratosféricas para la Modificación Climática) incluye a cuatro universidades, tres consejos de investigación, varios departamentos del gobierno y la empresa privada Marshall Aerospace.
Los grupos que firman la carta, dirigida al ministro del ambiente, Chris Huhne y a los Consejos de Investigación del Reino Unido, esperan lograr respaldo suficiente antes de que se hagan las pruebas, y que las autoridades reconsideren si permiten o no que siga adelante el controvertido experimento, cuya mecánica consiste en rociar agua desde una manguera de un kilómetro de largo, suspendida en el aire por un globo gigante.
Las pruebas están programadas para ocurrir en una pista aérea militar abandonada en Sculthorpe, en Norfolk, Reino Unido, entre el 6 y el 23 y octubre, publicó el sitio especializado en ambiente, Medio y Medio.
Los grupos que se rechazan el experimento argumentan que enviará la señal equivocada a la comunidad internacional, que adoptó una moratoria sobre las actividades de geoingeniería en octubre pasado durante la reunión del Convenio sobre Diversidad Biológica en Nagoya, Japón.
“Por un lado, nuestro gobierno está involucrado en negociaciones sobre geoingeniería y biodiversidad al financiar, moderar y participar activamente en las discusiones en el CDB. Por otro lado, está preparando el mecanismo para desplegar una muy peligrosa tecnología de geoingeniería. Tales pruebas no deben permitirse y menos cuando existe una decisión internacional que alude a ello”, dijo Helena Paul, de una de las organizaciones que participan en las discusiones en el CDB y en la iniciativa de la carta abierta.
Según Diana Bronson, del Grupo ETC, organización internacional que vigila el desarrollo de nuevas tecnologías, “este es un caballo de Troya. El problema no es que quieran rociar agua, sino que están preparando la tecnología para disparar sulfatos hacia la estratosfera para intentar bloquear la luz del sol que cae sobre la Tierra”.
“El manejo de la radiación solar, como se le llama a este tipo de técnicas, podría tener consecuencias devastadoras, como alterar los patrones de precipitación, amenazar la producción de alimentos y la salud pública; destruir el ozono y disminuir la efectividad de la energía solar, además de muchos otros impactos conocidos y desconocidos”, agregó.