Mendoza modificara el clima en forma artificial
Argentina Climática 22:51
Siembra de nubes - clouds seeding
El Laboratorio de Investigaciones Hidrodinámicas, Atmosféricas y Nubes para Desarrollos Operativos (LIHANDO), pertenece a la UTN —Facultad Regional Mendoza— y se dedica, ni más ni menos, que a modificar el clima en forma artificial. Es decir, trabajan sobre los procesos de los fenómenos meteorológicos que producen impactos negativos en las distintas regiones.
A través del método de siembra de nubes —conocido como clouds seeding— se puede lograr reducir las precipitaciones, si es que ha llovido demasiado, o controlar el granizo para que este llegue derretido o con piedras más pequeñas. Actualmente, este grupo de investigadores se encuentra desarrollando un proyecto que pretende incrementar el régimen de lluvias de las zonas áridas y desérticas mendocinas. El objetivo es responder al problema de la escasez de agua de la región, que afecta especialmente a la actividad agraria.
De esta manera, “estamos desarrollando reservorios sustentables de agua”, afirmó el licenciado en física y doctor en ingeniería Raúl Pérez en una comunicación telefónica con TELAM. Pérez es el director del LIHANDO y, por muchos años, trabajó en el programa de lucha antigranizo de la Provincia de Mendoza.
Justamente, este novedoso proyecto para incrementar las precipitaciones, ya sea en forma de lluvia o de nieve en alta montaña, se basa en la experiencia de lucha antigranizo y en el trabajo exitoso en la materia de países como Estados Unidos, Israel, China y Australia. De hecho, “estamos trabajando en convenio con investigadores de Texas, que hace 50 años que estudian estos temas y ya han ganado más de un millón de hectáreas al desierto con estos sistemas. Entonces, nosotros tomamos esta metodología y estamos adaptándola a la dinámica atmosférica regional de Mendoza”, explicó Pérez.
Al respecto, el investigador aclaró que un incremento de precipitaciones no es lo mismo que hacer llover. “Si existe una atmósfera con suficiente agua en estado de vapor, lo que buscamos es aumentar la cantidad de gotas en la nube. Para eso, introducimos un químico inocuo que no afecta al medio ambiente y que permite aumentar el número de gotas y las agranda. Cuando la gota se forma y empieza a caer, esta comienza a evaporarse. Entonces, lo que hay que lograr es que haya más gotas y de mayor tamaño para que durante la caída no se evaporen y lleguen en forma de lluvia o nevada”, puntualizó.
¿Cómo hacerlo?
Tuvieron que diseñar y desarrollar sus propios equipos. |
¿Pero cómo se llega hasta las nubes? El director del LIHANDO manifestó que existen dos caminos, dependiendo del lugar donde se realice la siembra de nubes. “En zonas llanas, que están casi a nivel del mar, como por ejemplo la Provincia de Buenos Aires o La Pampa, generalmente se utilizan aviones. Es decir, se colocan los equipos en un avión, se introducen en la nube y se va sembrando el material para que formen las gotas y caigan. En Mendoza, en cambio, nuestra zona de experiencia está a unos mil metros sobre el nivel del mar y el avión no es necesario. Basta con poner ciertos equipamientos fijos en tierra y desde ahí se siembra”.
Buscan incrementar el régimen de lluvias en zonas áridas de Mendoza. Lo mismo ocurre en trabajos de alta montaña. “Si queremos aumentar la precipitación nívea, podemos estar trabajando a tres mil o cuatro mil metros sobre nivel del mar en la montaña, sin ninguna necesidad de aviones”, agregó el investigador mendocino.
Para poder incrementar las precipitaciones, los científicos de la UTN de Mendoza tuvieron que diseñar y desarrollar sus propios equipos. Así, fabricaron unas estructuras fijas para usar en tierra donde se monta el material glaciógeno: yoduro de plata. Este material es aceptado por la Organización Meteorológica Mundial para actividades de modificación del clima porque está demostrado que es inocuo y, al mismo tiempo, es muy eficiente para formar gotas de agua o copos de nieve.
El problema es que el yoduro de plata es un material importado y muy costoso. Y para reducir los gastos, el equipo de ingeniería química de la UTN Mendoza ya está probando con otros materiales que permitan incrementar las precipitaciones. Además, junto con investigadores de la UTN de Bahía Blanca están diseñando un sistema de encendido por telefonía celular en forma remota. “Como nuestra zona de experiencia tiene 100 mil hectáreas y debe contar con 20 equipos, un sistema de encendido a distancia nos permitiría encender ciertos equipos de acuerdo a la posición de la nube directamente por señales de celular”, aseguró Pérez, quien además agregó que una vez terminado este sistema de encendido remoto, comenzarán las pruebas de campo.
La información climática para conocer la ubicación de las nubes se obtiene a través de una estación meteorológica automática y de los radares que posee la Provincia de Mendoza para la lucha antigranizo. “Toda esa información está on line en Internet y se actualiza cada cuatro minutos. Así podemos saber dónde está la nube, cuál es su tamaño, su dirección, su intensidad, qué recorrido hace y por cuál de los equipos va a pasar para encenderlo”.
Posteado por Valterber
el 22:51.
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