Putin decreta duelo nacional en Rusia.

El presidente ruso, Vladimir Putin, decretó este lunes como día de duelo nacional por los fallecidos a causa de las inundaciones registradas en la sureña comarca de Krasndorar, con saldo hasta hoy de 155 muertos.

El jefe de Estado ruso viajó la víspera en helicóptero a la localidad de Krimski, la más afectada, donde perdieron la vida 141 personas, las que se suman a nueve en Guelendzhika, dos en Novorosiisk y tres en la localidad de Baja Baganka, indicaron fuentes oficiales.

Por el momento el ministerio de Situaciones de Emergencia (MCHS) señaló que 21 cadáveres permanecen sin ser identificados. La mayoría de los decesos se produjeron entre las personas de la tercera edad, las más indefensas ante la acción de las aguas desbordadas.

En la zona de Kuban, en la cuenca del río Baganka, unas 30 mil personas se mantienen sin electricidad y más de 10 mil quedaron afectadas directamente por las inundaciones que obligaron a evacuar a más de 700 menores de campamentos de verano en la citada región.

Por su lado, el ministerio del Interior aseguró que fueron mínimos los casos de robos en los inmuebles de la región, abandonados con prisa por sus moradores en horas de la madrugada (horario local) del pasado sábado, para evitar el efecto de las riadas.

El presidente ruso afirmó la víspera que era necesario garantizar una vivienda para cada una de las familias afectadas y aconsejó buscar una zona más segura para situar las nuevas moradas.

Unos siete mil niños se encontraban en la zona del desastre para disfrutar de las vacaciones de verano, declaró la viceprimera ministra para asuntos de seguridad social, Olga Golodets.

El luto decretado por el jefe de Estado ruso esta relacionado con una accidente ocurrido ayer en la provincia ucraniana de Chernigov, con saldo de 14 muertos y 29 heridos, después que un ómnibus Scania volcó en una carretera con 41 personas a bordo.

El presidente ruso Vladímir Putin, que llegó anoche a la zona de la tragedia, también se preguntó acerca de las posibles responsabilidades, sobre todo en lo relativo al aviso que debió haber recibido la población sobre el peligro que se cernía sobre la comarca.

El jefe municipal del distrito de Krimsk, Vasili Kutko, respondió ante el presidente y aseguró que el aviso sobre las fuertes lluvias se recibieron sobre las 22.30 hora local del sábado, poco antes de que se desatara el temporal.

El máximo mandatario ruso celebró una reunión urgente en Krimsk y pidió celeridad a todas las autoridades para ayudar a los damnificados, eliminar en la medida de lo posible los colosales daños materiales e investigar las circunstancias de los sucedido.

«Más de 10.000 personas y 160 vehículos, entre ellos 12 aviones y helicópteros, trabajan en la zona», apuntó Putin.

Coincidentemente el 12 de julio del año pasado Rusia también tubo un día de duelo nacional debido al naufragio del barco Bulgaria que realizaba una traversía turística en el Volga. Se trato del accidente fluvial más grave ocurrido en Rusia en casi treinta años. De los más de doscientos pasajeros, sólo ochenta sobrevivieron.