Estado del futuro 2011. Lo que nos mata

El rápido desarrollo del mundo no mejora el bienestar de la gente. En particular, la inseguridad y la deuda se incrementan y la brecha entre ricos y pobres aumenta de manera "muy peligrosa". Estas y muchas otras conclusiones, negativas y positivas, aparecen en el informe 'Estado del Futuro 2011', presentado el miércoles en Buenos Aires.

Más de 3.000 científicos y especialistas de distintas disciplinas trataron de analizar distintos aspectos de la situación mundial en el marco del Proyecto Milenio. 'Estado del Futuro' es un informe anual que se publica desde 1997.

Según los científicos hay cierto optimismo en lo que nos rodea. Sobre todo sostienen que en el futuro nos espera lo bueno "porque se están haciendo más cosas bien que mal", aseguró el director de la iniciativa, Jerome Glenn, quien, no obstante, admitió que los desafíos son todavía muchos. En los últimos años el mundo ha avanzado en algunos términos sociales.

Así, últimamente se ha reducido considerablemente la tasa de mortalidad infantil, hasta un 30%. Asimismo ha aumentado el nivel de escolaridad en enseñanza secundaria.

En algunas partes del mundo donde hace unas décadas la situación con el saneamiento y la salud eran lamentables, hoy en día se nota una tendencia positiva. Con la introducción activa de programas sociales y médicos se han mejorado los indicadores globales de salud.

Mientras tanto, los expertos sostienen que hay muchos puntos que amenazan al mundo. Entre los términos preocupantes que siguen en aumento figuran el cambio climático, la corrupción y el terrorismo.

Así, el informe recuerda que el 90% de los desastres naturales ocurridos en el año pasado casi en todos los rincones del planeta estuvieron relacionados con el clima. Además, cerca de 900 millones de personas todavía carecen de acceso a agua potable y 2.600 millones no tienen saneamiento adecuado. La situación puede agravarse con el crecimiento de la población mundial que, en 2050, ascenderá a 9.300 millones de personas, alertan los científicos.

Otro punto que preocupa mucho a los expertos es la desigualdad total que persiste en la sociedad internacional. Se trata, en primer lugar, del bienestar económico que con el paso del tiempo y las condiciones actuales se ha deteriorado considerablemente por casi todo el mundo.

La brecha entre ricos y pobres sigue aumentando, más de 900 millones de personas, el 13% de la población, vive en una situación de extrema pobreza. Y la situación sigue empeorando por las graves condiciones de la crisis económica que ha infectado a casi todo el planeta.

Solo el crimen organizado mueve más de 3 billones de dólares al año, el doble del presupuesto militar del mundo y, según los cálculos del Banco Mundial, los sobornos absorben un billón de dólares anuales y el lavado de dinero hasta 6,5 billones.

Los investigadores subrayaron que el escenario más preocupante dibuja un aumento del crimen organizado en Latinoamérica hasta el punto de que la mitad del empleo podría estar ligado a actividades relacionadas con este delito, en especial con el narcotráfico.

Los investigadores realizaron un trabajo minucioso, analizando todos los aspectos de la vida del ser humano en el mundo contemporáneo. Tras ver los resultados empezaron a pensar en cómo combatir la situación no tan desconsoladora que nos rodea.

La propuesta de Jerome Glenn para combatir el problema pasa por un acuerdo global y por la intervención del Fondo Monetario Internacional y la Corte Penal de La Haya, mientras los gobiernos impulsan mecanismos de transparencia y educación para frenar la corrupción.

"Los delincuentes trabajan a nivel global y la estrategia de lucha tiene que ser también global", afirmó Glenn durante la presentación del estudio, que presta especial atención a la situación en América Latina.

El director del Centro Latinoamericano de Globalización y Perspectiva, además de participante en el Proyecto Milenio, mantiene que lo que vemos ahora "tiene muchas probabilidades de producirse si no hacemos nada", alerta.